Alimentos y bebidas

Eficiencia energética en alimentos & bebidas

Indicadores para el sector

Ahorro energético
20- 0 %

Ahorro de energía

Payback
0 meses

Payback medio

0

Proyectos por planta

Proyectos de ahorro
0

Proyectos < 12 meses

retorno

La industria de alimentos y bebidas presenta una matriz energética intensiva y diversificada, donde los procesos térmicos y frigoríficos concentran gran parte del consumo total. La generación de frío, la producción de vapor, los sistemas de aire comprimido, ventilación, bombeo y servicios auxiliares como iluminación y climatización, conforman los principales focos de consumo energético en planta.

Particularmente en plantas de alimentos congelados, lácteos, frigoríficos y bebidas, los sistemas de refrigeración industrial representan entre el 30% y el 50% de la energía eléctrica utilizada. Las oportunidades de mejora en este sector se centran en la optimización de compresores, evaporadores y condensadores, el ajuste de setpoints para minimizar las diferencias de temperatura, la implementación de variadores de frecuencia en bombas y ventiladores, y la automatización de la operación en función de la demanda térmica real. Asimismo, la recuperación de calor de los sistemas de compresión permite aprovechar la energía residual para precalentar agua de procesos o climatización, reduciendo el consumo de combustibles fósiles.

Particularmente en plantas de alimentos congelados, lácteos, frigoríficos y bebidas, los sistemas de refrigeración industrial representan entre el 30% y el 50% de la energía eléctrica utilizada. Las oportunidades de mejora en este sector se centran en la optimización de compresores, evaporadores y condensadores, el ajuste de setpoints para minimizar las diferencias de temperatura, la implementación de variadores de frecuencia en bombas y ventiladores, y la automatización de la operación en función de la demanda térmica real. Asimismo, la recuperación de calor de los sistemas de compresión permite aprovechar la energía residual para precalentar agua de procesos o climatización, reduciendo el consumo de combustibles fósiles.

En procesos térmicos, la generación de vapor y agua caliente sanitaria mantiene un peso relevante, especialmente en líneas de cocción, pasteurización, limpieza CIP y lavado de envases. La mejora en la eficiencia de calderas, mediante la regulación de quemadores, economizadores, recuperación de calor en purgas y control de cargas parciales, permite reducir consumos y emisiones asociadas. Además, en establecimientos con alta carga orgánica residual, como plantas de jugos, cárnicos o aceiteras, la cogeneración mediante biogás obtenido de digestores anaeróbicos se posiciona como una alternativa sustentable, capaz de abastecer parte de la demanda térmica y eléctrica de planta a partir de subproductos del propio proceso.

Los sistemas de aire comprimido, que suelen representar entre el 10% y el 15% del consumo eléctrico total, ofrecen oportunidades relevantes mediante la eliminación de fugas, ajuste de presiones, incorporación de variadores de frecuencia en compresores y secadores, y recuperación de calor de compresión. De manera complementaria, la sectorización de redes, gestión horaria y automatización contribuyen a reducir su impacto energético.

En procesos térmicos, la generación de vapor y agua caliente sanitaria mantiene un peso relevante, especialmente en líneas de cocción, pasteurización, limpieza CIP y lavado de envases. La mejora en la eficiencia de calderas, mediante la regulación de quemadores, economizadores, recuperación de calor en purgas y control de cargas parciales, permite reducir consumos y emisiones asociadas. Además, en establecimientos con alta carga orgánica residual, como plantas de jugos, cárnicos o aceiteras, la cogeneración mediante biogás obtenido de digestores anaeróbicos se posiciona como una alternativa sustentable, capaz de abastecer parte de la demanda térmica y eléctrica de planta a partir de subproductos del propio proceso.

En bombeo y ventilación, la incorporación de variadores de velocidad permite adaptar la operación de motores a la demanda real de cada proceso, evitando consumos innecesarios en momentos de baja carga. La automatización y el control remoto de estos sistemas permite integrar su operación a una estrategia energética global de planta.
La digitalización energética y la medición continua de consumos por sistema y proceso se consolidan como herramientas indispensables para la detección de desvíos, optimización de la operación y planificación de mejoras. La incorporación de sistemas de gestión energética, integrados a plataformas de monitoreo en tiempo real, permite visualizar oportunidades y tomar decisiones basadas en información precisa.
En conjunto, estas estrategias de eficiencia energética permiten reducir consumos, optimizar costos operativos, mejorar la competitividad de las plantas y reducir la huella de carbono asociada, en un contexto de creciente exigencia regulatoria y demanda del mercado por prácticas industriales más sustentables.

Contáctanos
para soluciones

Rellena el formulario y nuestro equipo de expertos te brindará soluciones personalizadas para optimizar el consumo energético de tu empresa.


Te ayudamos a reducir costos, mejorar la eficiencia y avanzar hacia un futuro más sostenible, alineado con tus objetivos de eficiencia energética y compromiso ambiental.